Los ciberdelincuentes están permanentemente ideando nuevas formas de engañar a la gente para quitarle su dinero. En los últimos días hubo vecinos de San Rafael que han recibido por correo electrónico supuestas notificaciones judiciales intimándole a pagar o informándole de una demanda inexistente.
El abogado local Anuar Sat se comunicó con Info YA! para advertir a la gente debido a que esta semana fue consultado por dos personas que recibieron vía mail estas falsas cédulas judiciales.
Una de las falsas notificaciones judiciales de demanda recibidas esta semana.
Explicó que se trata de "una especie de notificación de un supuesto juzgado o fiscalía cuyo remitente es de dudosa procedencia. Uno conoce los medios oficiales que hacen los tribunales y ninguno tiene ese remitente".
Además, "presentan muchas contradicciones como el tipo de delito y hasta vienen con errores ortográficos". Incluso por el tipo de lenguaje utilizado se cree que hasta pueden ser de otros países.
Para asustar a la persona que lo recibe "vienen con amenazas o advertencias de ‘último aviso', o que hay una deuda o que esa persona supuestamente ha cometido algún tipo de delito". Entonces "usan ese miedo como elemento de coacción para que eventualmente depositen o transfieran una suma de dinero en una cuenta".
Sat habló de dos posibles caminos a seguir por parte de los estafadores, o dan un CBU para concretar la transferencia o un número de teléfono para que "se comuniquen y a partir de ahí seguramente puedan ingresar a WhatsApp o a la cuenta de Mercado Pago".
Quiso dar a conocer esta situación para advertir a la comunidad porque "cada vez van perfeccionando más este tipo de maniobras y en algún momento los estafadores van a pegar el escudo de la provincia como si fuera un juzgado local".
Recomendaciones
El abogado recordó que a los dos que le consultaron "les aconsejé que bloqueen el remitente y no abran ningún archivo porque pueden tener algún famoso virus o troyano que roban los datos".
Y para las personas que puedan llegar a recibir estos correos recomendó en primer lugar que "lo desestimen porque las comunicaciones oficiales son por cédulas que las hacen llegar desde Tribunales o son cartas documentos". En caso de dudas, "que consulten con su abogado o con la Policía".
Y "si les dan algún número telefónico, no se comuniquen, ni respondan el correo electrónico. Tampoco abran los archivos adjuntos porque pueden traer virus".