Cinco integrantes de una familia murieron por intoxicación con monóxido de carbono en una casa del barrio porteño de Villa Devoto. El caso generó conmoción y las primeras pericias ya aportaron indicios sobre las causas que provocaron la tragedia. El análisis de los especialistas sobre el funcionamiento de la vivienda arrojó una combinación de fallas graves en la calefacción y en la ventilación. Muchas de esas fallas quedan en evidencia en las imágenes del inmueble al que accedió Infobae y acompañan esta nota.
Uno de los principales problemas detectados surgió en la caldera que abastecía el sistema de calefacción. Este artefacto originaba grandes cantidades de monóxido dentro de la cocina, un gas altamente peligroso y sin olor, que no era expulsado correctamente hacia el exterior.
En cambio, ese monóxido se filtraba a través de pequeñas aberturas en el cielorraso y entre el piso flotante, lo que favorecía la acumulación en los ambientes superiores de la casa.
La caldera presentaba múltiples desperfectos mecánicos. Parte de los deflectores del aparato se encontraba suelta, el radiador estaba tapado por corrosión y suciedad, y el conducto encargado de evacuar los gases tenía fisuras y óxido en toda su extensión, tal como puede observarse en la siguiente imagen.
En una de las pruebas hechas en la casa, el cuerpo de Bomberos porteño utilizó polvo fumígeno y comprobó que los gases de la combustión ingresaban directamente al ambiente en vez de salir al exterior, como señala la reglamentación.
Los técnicos remarcaron que el sistema de calefacción tenía un claro deterioro por la falta de mantenimiento, a lo que se sumaba una corrosión avanzada de los caños y la imposibilidad de obstruir las filtraciones.
Otro de los puntos clave fue la falta total de ventilación en la vivienda. Los expertos que revisaron las habitaciones observaron que todas las rejillas y aberturas estaban cubiertas con film y nailon, bloqueando la entrada de aire fresco y la salida de aire viciado.
En las ventanas y marcos también se colocaron cintas que sellaban las aberturas. De esa manera, los gases perjudiciales quedaban acumulados dentro de la casa, sin posibilidad de renovación. "Se desconoce quién realizó esto, pero la sospecha es que fue como intento de mantener el calor interior y protegerse del frío, algo que en este caso potenció el riesgo", explicaron las fuentes consultadas.
El análisis realizado junto a la empresa Metrogas, completaron, abarcó mediciones de monóxido en todos los artefactos a gas del domicilio, donde se hallaron concentraciones muy elevadas y fuera de toda norma.
Así, al elaborar una conclusión parcial sobre los factores principales que derivaron en el desenlace fatal, los especialistas hablan de una combinación de un mal funcionamiento del calefactor, la corrosión en los caños, la filtración de gases en la estructura del piso y la casa completamente sellada.
El trágico hecho se descubrió este martes, cuando los cuerpos de Demetrio De Nastchokine (79), su esposa Graciela Leonor Just (73), su hijo Andrés (43), la pareja del hombre, Marie Camille Lalanne (40), y su hija Elisa, de 4 años, fueron hallados sin vida en la propiedad ubicada en la calle Sanabria al 3700.
La primera alerta la dio un familiar, que llamó al 911 al no poder comunicarse con ellos. Los Bomberos encontraron los ambientes totalmente cerrados y debieron ventilar la vivienda para que personal del SAME confirmara los decesos.
Dentro de la casa también se encontraba un bebé de un año y medio, hijo de la joven pareja, que sobrevivió y fue puesto en resguardo rápidamente.
Según reconstruyeron las fuentes, Andrés, Marie Camille y la pequeña Elisa estaban en una habitación ubicada en el primer piso. El bebé, que no presentó signos de intoxicación grave, estaba en otro dormitorio del mismo nivel. En tanto, a los abuelos Demetrio y Graciela los hallaron sin vida en el segundo piso.
Helena, prima hermana de Andrés, contó que su tío había estado remodelando la casa para recibir a sus nietos. Explicó que Andrés, el menor de los cuatro hijos de la familia, vivía en Europa y planeaba pasar todo julio en Argentina junto a su esposa y sus dos hijos.
Incluso, la llegada de la familia al aeropuerto de Ezeiza fue documentada en redes sociales por otro de los hermanos De Nastchokine. En las imágenes, adjuntas en esta nota, se puede ver a Andrés y a su madre. Demetrio y Graciela eran padres de otros tres hijos: Maia, Alejandro y Sergio.
Cómo prevenir la intoxicación por monóxido de carbono
Desde el Hospital de Clínicas de la UBA dieron algunas recomendaciones para evitar este tipo de intoxicación.
¿Qué hacer para prevenirla?
- Ventilación: el monóxido de carbono es un gas incoloro, inodoro e insípido que necesita estar en un ambiente cerrado para generar presiones tóxicas. En caso de no contar con rejillas, se deben dejar abiertas las ventanas al menos unos centímetros para que circule el aire.
- Chequeos e instalación a cargo de un gasista: se debe contactar a un gasista matriculado para que haga una revisión periódica a los artefactos de calefacción, al igual que en el caso de querer colocar nuevos equipos.
- Evitar el uso de hornallas: dado que no se recomiendan para calefaccionar. En caso de utilizarlas, controlar el color de la llama, que debe ser azul para ser segura. Que esté amarilla o naranja es símbolo de mala combustión.
- Salamandras y braseros: utilizarlos para calentar los ambientes solo durante el día, contando con ventilación adecuada.
- Generadores eléctricos: dejarlos fuera de casa. Utilizan combustible y pueden generar un riesgo de intoxicación.