¿Quién no metió en el lavarropas alguna vez, un buzo frizado con una remera negra y la sacó cubierta de pelusas? ¿O simplemente metió todas las prendas y alguna desprendió más pelitos de lo esperado arruinando el resto de la ropa?
Hoy tenemos una alternativa para evitar estos inconvenientes y lograr un resultado perfecto en el lavado: Poné una esponja vieja dentro del tambor
Así como leés. Cualquier esponja de la que utilizás para lavar los platos sirve. Asegurate que esté limpia y ponela dentro del tabor junto con todas tus prendas.
Vas a ver que al completar el ciclo de lavado, habrá actuado como un imán para las pelusas y pelos sueltos. Eso sí, no olvides secarla entre uso y uso para evitar malos olores.
Como tip adicional, te sugerimos que metas las prendas del lado del revés, para preservar mejor tanto el tejido como los colores.