Tal como ha explicado el creador del belén, al principio tuvo "una gran acogida", pero cuando decidió compartir su obra a través de las redes sociales, comenzó un aluvión de críticas complicadas de soportar.
"Me dicen que soy satánico y que cómo se me ocurre cambiar la Historia", ha apuntado el creador de la escultura. Por su parte, los colaboradores han apuntado que "vivimos en un país de 'enfadicas'", pese a esto, todos han coincidido en que no es necesario llevar la inclusión a este tipo de representaciones.