Ahmad Vahidi, ex ministro del Interior de Irán y señalado como uno de los autores intelectuales del atentado a la AMIA en 1994, fue designado comandante interino de la Guardia Revolucionaria Islámica tras el fallecimiento de su antecesor, el general Hossein Salami, en el bombardeo llevado adelante por Israel.
Tiene un pedido de captura internacional librada por la Justicia argentina y una alerta roja de Interpol vigente desde 2007. Además su nombre integra el listado de terroristas buscados por Estados Unidos y otros países.
La Cancillería argentina ya había solicitado su detención meses atrás, cuando Vahidi viajó a Asia como parte de una comitiva oficial.
Vahidi, también conocido como Ahmad Shah Cheraghi, tiene 67 años y ha ocupado cargos de alto rango dentro del régimen teocrático iraní. Fue comandante de las Fuerzas al-Quds, el brazo de operaciones internacionales de la Guardia Revolucionaria, y figura entre los implicados en la reunión donde se habría definido el atentado a la mutual judía AMIA, según la investigación llevada adelante por el fiscal Alberto Nisman.
El informe de la Unidad de Información Financiera (UIF) de 2017 señaló que Vahidi y Moshen Rezai integraron el núcleo que, desde una oficina de inteligencia, evaluó la propuesta de atacar en suelo argentino. La ejecución fue encomendada a la Jihad Islámica del Hezbollah del Líbano.