La historia de Agostina Hein, la nadadora estrella de Argentina

Hace 6 minutos

La deportista nacida en Campana, de 17 años, brilló en el agua en el certamen juvenil y cosechó tres preseas doradas. Nada desde niña y siempre se destacó su talento

 Con solo 17 años y un talento inusual para desplazarse en el agua mucho más rápido que los demás, Agostina Hein se ha convertido en la gran figura argentina en los Juegos Panamericanos Junior que se están disputando en Asunción, Paraguay. La deportista nacida en Campana, provincia de Buenos Aires, sumó ocho medallas, tres de ellas doradas, y logró registros que la posicionan a nivel internacional.

Su nivel superlativo en su primer día de competencia, cuando el 10 de agosto ganó la final de los 400 libes femenino con un tiempo de 4:06.96. Pero el dato cobra más sentido en contexto: con ese registro mejoró siete segundos su propia marca, con la que ya era récord panamericano juvenil y que había conseguido en la serie de clasificación.

Para tener dimensión de su logro hay que remontarse a un año atrás, cuando participó en los Juegos Olímpicos de París, a los que fue como la más joven de la delegación albiceleste, y registró unos 4:14.24, que la dejaron afuera de la final.

 Pero por si eso no fuese poco, el jueves en la definición de los 400 metros combinados individuales, también clavó una marca inédita: 4:47.90, que es el nuevo récord panamericano en la categoría y mejoró en siete segundos al registro que la precedía. Además, la tercer presea dorada la ganó en 200 metros combinados con récord Panamericano Junior y argentino en la especialidad.

 Para quienes están inmersos en el mundo de la natación, las descomunales actuaciones de la adolescente no resultan inesperadas: hace tiempo que se habla de Hein como una de las principales promesas del deporte argentino. Con 15, fue bronce en el Mundial Junior de natación que se disputó en Israel y marca A para participar en el Mundial de Doha en 2024, donde un quinto lugar en los 800 metros libres y el octavo en los 400 metros libre la depositaron en París.

Solo una nadadora argentina había logrado ser medallista en un Mundial. Se trata de Delfina Pignatiello, otra de las grandes apariciones del deporte argentino en los últimos años que brilló como juvenil y fue a los Juegos Olímpicos de Tokio pero luego de estos se alejó de la competencia hastiada de las presiones y el hostigamiento .

Por estas razones trabaja desde 2019 con la psicóloga Agustina Mayer para manejar las presiones y la propia autoexigencia que cada deportista se pone, así como la exposición y expectativas que puedan llegar desde afuera. Aún así, no es sencillo. "El año pasado no pensé estar acá. Quería tirar la toalla después de unos torneos muy complicados para mí psicológicamente. Pero estoy muy orgullosa de mí misma, de estar acá y de representar a Argentina", le contó la atleta a Infobae.

Desde que tiene 7 años, Agostina compite en natación, pero el momento clave lo vivió a los 11 cuando empezó a ser entrenada por Sebastián Montero, con quien trabaja hasta hoy. Se conocieron en los certámenes que organizaba la Federación de Aficionados de Natación del Norte de la Provincia de Buenos Aires. "Habitualmente mi club competía con el de ella. Pero Agos se sentía atraída e identificada con nuestro equipo así que apenas se sumó el cambio de nivel fue beneficioso", le contó su preparador a El Destape.

Para Sebastián, la clave es que de chicos los nadadores aprendan la técnica correcta de cada estilo y luego con el tiempo profundicen en los tiempos. Desde el inicio detectó en Hein cualidades innatas. "Siempre tuvo muy buena altura, muy buen porte; pero sobre todo mucha sensibilidad en el agua. Te dabas cuenta que ella hacía todo muy natural. Y es algo que no se logra con el tiempo, sino que uno nace con ello", dijo.

Ese trabajo que comenzó hace casi una década empieza a ver sus frutos a nivel internacional y posicionó a la joven como una de las deportistas del futuro en Argentina. En el medio hubo trabajo silencioso, sacrificios y decisión, como haber dejado la escuela y a sus compañeros el año pasado para cursar bajo el Sistema de Educación a Distancia del Ejercito Argentino (SEDEA), como han hecho otros deportistas, tal es el caso de Juan Martín Del Porto. Mientras, Hein sueña y se entrena. Talento le sobra. Hasta dónde llegará dependerá de lo que queira ella.