Un sanrafaelino entre los presos imputados por venta de drogas en Almafuerte
Se trata de Juan Cruz Arregui que fue condenado a 12 años por un homicidio en el barrio Constitución
La Justicia Federal imputó a 4 presos y a la hermana de uno de ellos por integrar una banda, con complicidad del Sistema Penitenciario, que se dedicaba a ingresar droga y venderla en el Penal de Almafuerte.
Entre los internos imputados se encuentra Juan Cruz Arregui, que fue condenado a 12 años por el homicidio de Eduardo Cruzate ocurrido el 16 de abril del 2018 en el barrio Constitución.
El secuestro de más de 3 kilos de marihuana que estaban escondidos en un gallinero ubicado en un Pabellón y la detención en diciembre pasado de un guardiacárcel que se sospecha es cómplice de la banda, inició una investigación que desencadenó en las imputaciones contra el uniformado, Renzo Rojas, que está en prisión domiciliaria.
También fueron imputados los internos Pedro Esteban Morales Anisco, condenado por homicidio, Juan Cruz Arregui por asesinato, Ángel Kevin Maximiliano Fernández con una condena de 14 homicidio agravado, Marcelo Agüero Declaux y su hermana Yamila Agüero.
Morales Anisco, quien está señalado como un reo que ejerce control económico y logístico sobre el módulo 4.1, habría coordinado la llegada de estupefacientes con la complicidad del penitenciario.
A su vez, los otros internos también tenían contacto con Rojas para el ingreso de las sustancias, según se desprende de los peritajes que hicieron en el teléfono celular.
Justamente, el caso que detonó la investigación fue la detención el pasado 19 de diciembre de Rojas, suboficial auxiliar de Seguridad Interna con 15 años de servicio en el penal, quien fue sorprendido intentando ingresar casi 300 gramos de cocaína, 788 gramos de marihuana y medio millón de pesos en efectivo.
La marihuana la tenía oculta en su vehículo y estaba acondicionada en formas específicas, tal como requerían los internos.
La fiscalía federal ordenó el secuestro del teléfono celular de Rojas, que fue sometido a peritajes en la Policía contra el Narcotráfico (PCN). Los análisis revelaron comunicaciones con varios internos, entre ellos los imputados, donde se evidenciaba la recepción de pagos a cambio del ingreso ilícito de sustancias prohibidas y otros elementos.
La investigación confirmó en esta etapa que Morales Anisco utilizaba sus contactos en la calle para conseguir droga y dependía del apoyo de Rojas para introducirla en el penal, configurando de esta forma una cadena logística organizada.
El operativo se sumó a un hallazgo previo realizado en el módulo 4.1 a principios de diciembre, conocido como el "pabellón VIP", donde en un gallinero fueron encontrados enterrados más de 3,5 kilogramos de marihuana y dosis de cocaína en un desagüe.
Se trataba de una estructura que articulaba el tráfico de estupefacientes dentro y fuera del penal, utilizando cuentas virtuales para mover grandes sumas de dinero, dificultando así el seguimiento financiero.
Asesinato Cruzate
Eduardo Alejandro Cruzate Arenas fue atacado en la esquina de Bernardo de Irigoyen y Rodríguez Peña, en el interior del barrio Constitución. La víctima fatal vivía a pocos metros y tenía un fuerte vínculo con el Club Deportivo y Social Constitución, tal como recordaron desde su entorno, del cual era asiduo hincha.
Cerca de las 14 del 16 de abril de 2018, el hombre circulaba en su bicicleta por esa esquina cuando fue interceptado por un vehículo blanco. Desde el rodado efectuaron algunos disparos y dos impactaron contra la humanidad del padre de dos niños.
Cruzate resistió algunos segundos y tocó la puerta de un domicilio, pidiendo ayuda. El vecino lo trasladó en su vehículo particular hasta el Hospital Schestakow, donde ingresó al quirófano con heridas de bala en el tórax y en su pierna derecha.
Las autoridades judiciales pusieron una consigna policial en su habitación ya que el baleado tenía un pedido de captura en una causa por violencia de género. Según trascendió, su expareja lo denunció por haberla golpeado aunque desde su entorno adujeron que se trató de un invento para separarlo de sus hijos.
Lo cierto es que a las 22 los profesionales de la salud constataron su deceso y la investigación quedó en manos de la fiscal Andrea Rossi.
Juan Cruz Arregui fue detenido en mayo del 2018 en Malargüe hacia donde se había fugado luego del crimen.