Julieta Silva se largó a llorar: arriesga penas durísimas por los delitos imputados
El debate que fue a puertas cerradas porque estaba involucrada una menor de edad en la causa por amenazas y desobediencia judicial
La situación judicial de Julieta Silva es muy delicada por los hechos que se le imputan y que se ventilaron en la audiencia de prisión preventiva que se realizó este viernes en los Tribunales de San Rafael.
Es que son varios los delitos que se le imputan a la mujer que ya fue condenada por homicidio culposo agravado cuando atropelló y mató a su ex novio Genaro Fortunato.
La acumulación de los mismos podría conducir a una sentencia que podría superar los 40 años de cárcel porque se repitió en el tiempo uno de los hechos más graves denunciados por su esposo actual Lucas Giménez que la acusó de haberlo encerrado en su casa en al menos 10 oportunidades donde le habría quitado hasta el teléfono celular.
Esto habría ocurrido en el transcurso de 2 años de la relación según denunció Giménez que también la acusó de haberlo golpeado en más de una oportunidad.
Aparentemente cada vez que discutía la pareja, Silva se iba de la casa y lo encerraba por varias horas e incluso noches enteras a Giménez. Para este tipo de delitos el artículo 142 prevé penas que van desde los 2 a los 6 años sin contemplar la continuidad de los mismos.
Lo cierto es que por estas acusaciones de lesiones leves y privación ilegítima de la libertad Silva fue detenida y se le dictó la prisión preventiva que empezó a cumplir en modo domiciliario.
Sin embargo esto se agravó cuando el fiscal Fabricio Sidoti compulsó denuncias en el Juzgado de Familia por amenazas y desobediencia judicial a una orden de contacto con una menor de edad que es hija de Lucas Giménez de una relación pasada.
En diciembre del 2024, Silva amenazó a la madre de esta niña con "dejarla en la calle y comerle el hígado y los riñones a ambas".
Después de esta amenaza la Justicia de Familia dictó una orden de impedimento de contacto de Silva hacia la menor de edad y a su madre.
Sin embargo el 16 de julio de este año Julieta Silva desoyó esta orden y en una comunicación telefónica por video en Whatsapp con Lucas Giménez renovó el contacto con la niña.
Por estas dos causas que se acumularon a las anteriores, Sidoti resolvió revocar el beneficio de la prisión domiciliaria y Silva quedó detenida en la Cárcel hasta este viernes cuando el juez Claudio Gil confirmó la prisión preventiva de la acusada pero le otorgó ese beneficio para que se pudiera hacer cargo de la hija de 2 años que tuvo con Lucas Giménez hasta que se integren los informes que el magistrado solicitó al Equipo Técnico Interdisciplinario y al Juzgado de Familia a los fines de determinar si la misma está en condiciones de cuidar de la menor.
Silva se retiró de la audiencia esposada, con sus ojos llorosos y la mirada gacha sin decir una palabra ante el requerimiento de Info YA! que le ofreció el micrófono para hacerlo.