Eco de los Andes y el negocio de llevarse el agua de los mendocinos por monedas

Por cada mil litros de agua extraída paga solo $1.200. Todos los intentos legislativos por imponer un precio más justo han chocado contra el lobby empresarial.

La discusión sobre el cobro de regalías a las empresas que explotan el agua mineral  en Mendoza no es nueva. Hace al menos ocho años que el tema recorre despachos legislativos, reuniones de comisión y hasta mesas de diálogo público-privadas, sin que hasta ahora se concrete en una ley que modifique sustancialmente lo que pagan las grandes embotelladoras internacionales por este recurso natural escaso.

Así, empresas como Eco de los Andes (vinculada a Nestlé) siguen extrayendo agua de los suelos provinciales a cambio de cánones irrisorios. Y los proyectos de modificar eso duermen en la Legislatura.

El primer antecedente formal surgió en 2017, de la mano del entonces diputado provincial Emiliano Campos (UCR). Su proyecto proponía crear las llamadas "Regalías Hídricas" -inspiradas en las regalías petroleras- para las empresas que extraen y embotellan agua mineral. La idea era que las grandes firmas -como Danone (Villavicencio) y la mencionada Nestlé- pagaran un 3% del valor de venta por cada litro extraído, con destino a obras hídricas, protección ambiental y conservación de la cuenca.

También la ex diputada del PJ Marisa Garnica presentó un proyecto similar, pero ninguno de los dos ha visto la luz, y el canon por el agua mineral que se comercializa es irrisorio: $1.200 por metro cúbico, lo que equivale a una botella en la góndola. Téngase en cuenta que en 1 metro cúbico de agua caben nada menos que 1.000 litros.

Qué decían los proyectos sobre el agua mineral

El proyecto establecía además un Registro de Usuarios Industriales y la obligatoriedad de instalar caudalímetros para medir el agua captada. Las pequeñas y medianas empresas locales quedarían exentas. Sin embargo, la iniciativa nunca superó el tratamiento en comisiones, debido a la presión de los grandes actores del sector, según admitieron por entonces fuentes legislativas.

Por ese entonces, las empresas pagaban apenas $24 por cada 1.000 litros de agua extraída (0,024 pesos por litro). En 2020, esa cifra se actualizó a $65 por cada 1.000 litros, todavía muy lejos del valor real del producto en góndola.

El debate volvió a la superficie en 2022, cuando tanto Campos como Garnica (PJ) pidieron establecer este régimen de regalías. Las propuestas coincidían en fijar un 3% del valor de venta de cada litro embotellado y sumaban la obligación de rotular los envases con la leyenda "Producto Mendocino". También incluían a las aguas termales.

La coincidencia entre el radicalismo y el peronismo permitió unificar criterios y generar dictámenes en comisiones, pero nuevamente el lobby empresarial operó para frenar el tratamiento en el recinto.

En paralelo, el gobernador Rodolfo Suárez firmó un decreto que creó el Fondo de Agua del Río Mendoza, en el marco de un acuerdo público-privado con empresas como Danone, Nestlé, Coca-Cola y otras multinacionales, más organismos internacionales como el BID y organizaciones ambientales. Este movimiento fue interpretado por la oposición como una forma de desactivar la discusión legislativa de fondo, sin avanzar en la fijación de regalías reales.

Nuevos cánones para el agua mineral en el 2024

El último movimiento institucional fue la publicación de la Resolución 664 del Departamento General de Irrigación (DGI), en diciembre de 2023. Allí se fijó en esos $1.200 por metro cúbico (equivalente a $1,20 por litro) el canon que deben pagar las empresas por el uso de agua para envasado. Si bien significó un salto importante respecto de los valores históricos, sigue estando muy por debajo de lo que representa el precio minorista del agua mineral, cuyo valor supera en góndola los $1.000 por litro.

Se calcula, pues, que las multinacionales que extraen el agua mineral de Mendoza pagan menos del 0,1% del valor de venta de su producto en concepto de tasas provinciales. Y es que la provincia aún no aplica un esquema de regalías proporcionales al valor comercial de la materia prima, como ocurre con la minería o el petróleo.

Tampoco se avanzó en la implementación efectiva del registro obligatorio de usuarios industriales ni del control con caudalímetros, tal como proponían los proyectos originales.

El peso de un recurso estratégico

Más allá de los números concretos, la discusión tiene un trasfondo estratégico: Mendoza es una provincia árida, donde el agua es un recurso limitado y de altísimo valor ambiental, social y económico. Mientras las regalías petroleras y mineras están plenamente vigentes, el agua mineral embotellada sigue sin dejar una renta equivalente para las arcas provinciales.

Un reciente artículo de El Cronista volvió a poner el tema en agenda al señalar que grandes empresas internacionales lucran con un recurso natural clave sin pagar regalías proporcionales a su volumen de negocios. Esta situación genera malestar social y político, sobre todo en un contexto de sequías recurrentes y de creciente demanda hídrica.

Una discusión abierta y sin resolución

En junio de 2025, los proyectos de ley para instaurar regalías hídricas siguen en comisiones legislativas sin fecha para ser tratados en el recinto. El acuerdo público-privado del Fondo de Agua se mantiene vigente, pero su alcance concreto y su impacto en obras de infraestructura hídrica son poco transparentes.

Así, la posibilidad de que Mendoza logre finalmente que las empresas de agua mineral embotellada paguen regalías reales -como sucede en otras industrias extractivas- sigue siendo una deuda pendiente del sistema político provincial.

Fuente Diario UNO